lunes, 1 de agosto de 2011

(L)

Esas noches que no sabía que ponerme y me pasaba horas delante del armario, pensando en algo que me favoreciera para impresionarte, y mirando el reloj que avanzaba deprisa a la hora que ibas a pasar a recogerme. Recuerdo como, cuando al fin elegía algo para ponerme, elegía una ropa interior bonita, y corría a la ducha. Luego me miraba mil veces al espejo, me peinaba y maquillaba para estar perfecta y olía todas mis colonias para elegir la que posiblemente más te gustara, hasta oir el pito de tu moto en la calle y que entonces el corazón me latiera más rápido y corriera a meter todas esas cosas, quizás tan inútiles, en mi bolso.
Y elegir por el camino el sitio a donde ir a cenar, aunque siempre acababas eligiendo tu, porque a mi "me daba igual". Y abrazarte con fuerza en la moto, sonreir cuando metías tu mano en tu bolsillo con la mía, o ponerme nerviosa cuando la apoyabas en mi pierna y me acariciabas. Ir a cualquier sitio, que mas daba, si ibamos a estar juntos, iba a estar contigo; y allí charlar de mil cosas sin importancia, pero que nos hacía reir. Porque eramos tu y yo, tan conocidos como desconocidos, con mil cosas que contarnos y mil sueños e ilusiones. Después de cenar podríamos ir a cualquier sitio, a por un helado quizás, a un parque a seguir charlando de mil cosas, o a mi casa.
En mi casa, donde luego yo buscaría un pijama bonito que ponerme para sorprenderte y llenaría mi cuarto de velas. Donde intentaba crear un ambiente perfecto, tan perfecto como esas noches. Y ahí, en mi cuarto, en mi cama, nos perdíamos juntos, no se cuanto tiempo, hasta que mi cuerpo olía a ti y el tuyo a mi.
Y luego sentirme la más feliz, tumbada en la cama a tu lado y mirando lo bonito que eres. Las ganas de llorar no faltaban, pero de felicidad, de lo bonito que era ir descubriendo cosas de ti, de tu vida, de tu cuerpo y de tus sueños, manías, gestos.. Lo único que importaba era estar ahí tumbada contigo, acariciarte, y que algún otro te quiero se escapara de nuestros labios, tan sincero como travieso..
Y luego, cuando tu te ibas, volver a tumbarme en mi cama donde todabia olía a ti, y pensar en lo fantastica que es la vida, hasta quedarme dormida..(L)

No hay comentarios:

Publicar un comentario